QUINCY
Quincy
Rashida Jones, Alan Hicks
(Le Train Train-Netflix)
Este es el hombre que estuvo en coma varios días y que, cuando despertó, se marchó directo a su propio funeral, preparado de antemano, para disfrutar con sus amigos. Es, también, el hombre que estuvo detrás del disco más vendido de la historia de la música (Thriller, cómo no) y de otros muchos grandes éxitos. El vividor y el músico. El anciano que ha dejado de beber y al que todos acuden buscando consejo.
Son 70 años en la música -y en la industria de la música- los que intenta resumir este documental sobre Quincy Jones, quien asegura ya al principio que aprendió a vivir entre Ray Charles y Frank Sinatra y que Count Basie le dijo que aprendiese a lidiar con los valles, que las colinas se lidian solas. Además, afirma que compone de noche, que es cuando llega la musa, y que no duerme porque tiene demasiado en la mente. Y no todo es música: otro de sus allegados asegura que nadie debe intentar hacer lo que él ha hecho, porque acabarían muertos.
Aún con todas las revelaciones y el acceso total a su protagonista, se nota que es su propia hija uno de los dos directores detrás de la cámara y que su tono es, más que nada, hagiográfico. A sus 85 años, está claro que su familia quiso dejar un testamento fílmico antes de su desaparición en el que Jones saliese bien parado, y no dejarlo en manos de otro, por lo que se puede decir que han cumplido perfectamente con lo que pretendían.