ULTRASÓNICA ARTÍCULO ANÉCDOTAS DE KURT COBAIN
Las anécdotas de Kurt Cobain y Nirvana
Conviene desmitificar el mito. Kurt Cobain era un ser atormentado y su muerte a los 27 años lo elevó al olimpo del rock. Pero en su vida -como en todas, por otra parte- hubo un buen montón de hechos que han quedado como anécdotas curiosas y que nos ayudan a dar una visión menos trascendente de Kurt Cobain. Ahora que se cumplen 10 años de su suicidio, éste es nuestro pequeño homenaje.
– Hubo otros dos grupos que se llamaron Nirvana. El primero tuvo cierta repercusión en los 60. El segundo fue un grupo de rock cristiano de principios de los 80 que intentó presentar una demanda contra el grupo de Kurt por uso indebido del nombre. Cristianos sí, pero la pasta también.
– La primera guitarra -de segunda mano- de Kurt fue un regalo de su tío a los 14 años. Sin embargo, para conseguir su primer amplificador, Kurt tuvo que recuperar del río la pistola con la que su madre acababa de apuntar a su nuevo marido después de que ésta la arrojara al río Wishkah. El nombre del rió serviría para dar título al disco en directo póstumo de 1996. Y de la pistola nunca más se supo.
– Al comienzo de su carrera, a su madre no le gustaba la compañía de su hijo, por lo que no le permitía dormir en casa. A veces dormía en casa de un amigo y, otras, debajo de un puente. De ahí surgió “Something In The Way” que habla, precisamente, de lo que se siente al dormir debajo de un puente -y no en casa de un amigo, claro-.
– En 1986 Kurt compró media docena de tortugas y las puso en una bañera en su salón. Cuando aquello empezó a oler mal, Kurt optó por una solución drástica: hizo un agujero en el medio del salón. Años después, cuando intentó contratar a alguien para la limpieza de su casa en Seattle, una señora se presentó, echó un ojo a lo que había alrededor y salió gritando: “¡Satán vive aquí!” Los vecinos estaban encantados con el espectáculo.
– Un buen día Kurt y Krist Novoselic decidieron cambiar el nombre de su grupo por el de Nirvana, que es una palabra del sánscrito que significa el estado de la suprema sabiduría. ¿Y cuál era el nombre que dejaron atrás? Ed Ted and Fred and Fecal Matter -Ed Ted y Fred y la Materia Fecal-. Similar, desde luego.
– Después de una actuación bastante mala en 1988, Kurt y Krist Novoselic estaban tan enfadados con su primer batería, Chad Channing, que decidieron romperle la batería en el escenario. Lo que hicieron pronto se convirtió en una rutina si los conciertos salían mal. ¿Y si salían bien? Entonces rompían sus instrumentos porque estaban contentos.
– “Smells Like Teen Spirit” le debe su título a una amiga de Kurt. Una noche, bastante bebidos, ambos estaban discutiendo sobre la revolución juvenil, y su amiga acabó escribiendo en una pared “Kurt huele a espíritu adolescente”. Kurt se inspiró en eso después de llegar a la conclusión de que podría ser alguien capaz de inspirar una rebelión juvenil. Lo que su amiga pensaba de verdad es que Kurt olía a un desodorante llamado Teen Spirit del que Kurt, hasta entonces, ni había oído hablar. La canción fue grabada en sólo tres tomas con todo el grupo tocando a la vez, espoleados por la inmediatez del punk.
– La canción “Stay Away” de Nevermind se iba a titular “Pay To Play” (“Pagar por tocar”). Alguien debió pensar que no era una buena idea.
– “Polly”, título de una de las canciones de Nevermind es el nombre comúnmente utilizado para llamar a un loro. Sin embargo, de lo que habla la canción es de un estupro. La versión que se escucha en el disco es en realidad una maqueta del año 90 registrada con una guitarra acústica de sólo 5 cuerdas que Kurt nunca afinaba del todo. Se intentó grabar con todo el grupo, pero no funcionaba. En una de las sesiones, Kurt salió del estudio y se puso a tocarla en un sillón. Butch Vig, el avispado productor, cerró con llave el control y aprovechó dos micrófonos para grabarla. Había solucionado uno de los principales problemas de aquellas sesiones.
– Al final de Nevermind, diez minutos después de que acaba el último corte, aparece una canción no listada en los créditos. “Endless, Nameless”, que así se titula, es una de las canciones más largas -seis minutos- y más punk de Nirvana. En gran parte de la tirada original en Estados Unidos y muchos países se omitió por error. Hoy en día es, probablemente, la canción no acreditada más famosa.
– Nevermind ha vendido más de 15 millones de copias. Fue el disco que desbancó del número 1 a Dangerous de Michael Jackson. Con respecto a la imagen que tenía la gente del álbum, Kurt se sentía culpable y llegó a confesar: “Todos piensan que nos hemos gastado algo así como ocho millones de dólares en el disco y que nos llevó como seis meses, cuando lo cierto es que nos llevó tres semanas.” A pesar de que no fue un disco caro, estuvo lejos de costar los -únicamente- 600 dólares que costó su debut, Bleach.
– En la entrega de premios de la MTV de 1992, mientras interpretaban “Lithium”, el bajista Krist Novoselic lanzó su bajo al aire y no lo pudo coger. Cayó en su cabeza y lo tiró al suelo. Kurt, que no lo había visto, empezó a gritarle por no seguir el ritmo. En la misma ceremonia, Kurt envió a alguien disfrazado de Michael Jackson a recoger uno de los premios para Nirvana y le hizo decir: “¡Soy el rey del grunge!”. Ya sabemos en qué se inspiró James Cameron, el director de Titanic, a la hora de recoger su Oscar.
– En uno de sus conciertos en un festival británico en 1992, Kurt apareció con un pijama de hospital y en una silla de ruedas, gritando: “No tengo el más mínimo respeto por los ingleses. Me ponen enfermo.” Menos mal que el escenario estaba lo suficientemente lejos del público.
– El último disco en estudio del grupo, In Utero, se iba a titular “I Hate Myself And I Wanna Die” (“Me odio a mí mismo y quiero morir”). De nuevo, parece que a alguien no le pareció buena idea.
– Cuando Nirvana fue a grabar el concierto acústico para la MTV que se convertiría en el disco Unplugged In New York, le pidió al realizador que llenase el escenario de velas y flores. Éste le comentó que aquello parecería un funeral, a lo que Kurt le respondió que eso era justo lo que pretendía.
– En una ocasión, a la pregunta de cómo definiría su sonido, Kurt respondió: “Creo que sonamos como The Knack y The Bay City Rollers molestados por Black Flag y Black Sabbath.”
– Cuando Kurt estuvo en Brasil, le dejó dinero a alguien para que le enviara toda la discografía de Os Mutantes. Antes de morir, Kurt envió una carta a Arnaldo Baptista, líder del grupo brasileño, en la que le confesaba su admiración por la banda. Arnaldo no conocía a Nirvana; recientemente confesó que creía que el tal Cobain vivía en África.
– Los informes policiales afirman que Kurt murió el día 5 de abril de 1994. Sin embargo, su madre afirma haber recibido una llamada de su hijo en la noche del 6 de abril. Conviene recordar que su cuerpo fue encontrado el día 8 en su propia casa. Para más misterio, un detective asegura que Kurt se había inyectado tres dosis de heroína antes de morir y que, así, no se hubiera podido levantar ni, mucho menos, apretar el gatillo. Eso sin hablar de la película que parecía conducir a la teoría de que Courtney Love había sido la que había urdido un asesinato. Como siempre en estos casos -recuerda lo de Marilyn Monroe-, ya tenemos munición para llenar libros con las teorías más dispares.
– En sus diarios, publicados en 2002, aparece la frase “Hope I die before I turn into Pete Townshend” (“Espero morir antes de convertirme en Pete Townshend. La frase más famosa del himno “My Generation” de The Who, compuesta por Townshend años atrás, decía: “Hope I die before I get old” (“Espero morir antes de llegar a viejo”). Pete Townshend está vivo y Kurt Cobain no.