Bandas con nombre de canciones de otros: revisitando el santoral rock (1)
Bandas con nombre de canciones de otros: revisitando el santoral rock (1)
Montas tu grupo, compones tu primera canción y entonces surge la primera disyuntiva: cómo nombrar a la banda. Una solución bastante socorrida es buscar inspiración en aquellos que te precedieron, en concreto alguna de sus canciones, hayan sido éxitos o caras B de las que nadie se acuerda. Recordamos a continuación los ejemplos más memorables en tres partes. Esta es la primera.
Juan Carlos León y Xavier Valiño
ABC: Su primer single aparecía con las letras ABC y el grupo aseguraba que era el acrónimo de “Always be cool” (“Mantén siempre tu atractivo”) para contrarrestar a los que decían, malintencionadamente, que significaba “Awfully boring crap” (“Basura terriblemente aburrida”). Sin embargo, la verdadera razón era que las tres primeras letras del alfabeto son reconocidas internacionalmente y así los colocarían los primeros en las estanterías de las tiendas de discos. Y, además, coincidía con el título de la canción de The Jackson 5 que había desbancado en 1970 a “Let It Be” de The Beatles de lo alto de las listas norteamericanas.
Baby Lemonade: El segundo álbum en solitario de Syd Barret, Barret (1970), que volverá a aparecer de nuevo en este artículo, se abría con la canción “Baby Lemonade”. El comienzo de esta es una grabación del propio Barret calentando con su guitarra, que Gilmour capturó en el estudio y colocó como prólogo de canción y disco. Bien, pues el título de este tema lo utilizaron los chicos de Baby Lemonade para bautizarse a comienzos de los noventa y ganar protagonismo haciendo de banda de respaldo de lo que quedaba de Arthur Lee en 1993. También giraron con Johnny Echols, doctorándose en Love.
Bad Brains: Los orígenes de la banda se remontan a 1976, cuando los miembros del grupo empezaron como una banda de jazz fusión llamada Mind Power, en la estela de formaciones como Return to Forever y Mahavishnu Orchestra. En 1977, el entonces cantante de la banda, Sid McCray, los introdujo en el punk rock y el hardcore, cambiando su nombre por el de la penúltima canción del álbum Road to ruin (1978) de Ramones.
Barracudas: Los angloamericanos The Barracudas vieron la luz a finales de 1978 tras una fugaz y, por suerte, rectificada, denominación como R.A.F. Los autores de “Summer Fun” homenajearon a lo largo de su carrera al garage-rock desde el mismo momento de su bautizo, ya que tomaron el nombre de la canción “Barracuda”, incluida en el cuarto elepé de los californianos Standells, Try It (1967), y compuesta por su mánager, Ed Cobb.
Blonde Redhead: “Blonde Red Head” es una canción que apareció en el EP “A Taste of DNA”, publicado por la banda neoyorquina de no wave DNA en 1981, antes de separarse. Años después, en 1993, la kiotense Kazu Makino, junto a los hermanos Pace, formaron un grupo, también en Nueva York, al que llamaron Blonde Redhead. Como curiosidad, la banda que les proporcionó el nombre también tomó el suyo de una canción de Mars, otra banda de la hornada no wave neoyorquina.
Canned Heat: El grupo fue formado por dos entusiastas del blues, Alan Wilson y Bob Hite, quienes tomaron su nombre de la canción “Canned Heat Blues” de Tommy Johnson de 1928. Ese tema hablaba de un alcohólico que, en tiempos de la prohibición, cuando no era posible encontrar whiskey, extraía el alcohol de un combustible llamado Sterno, utilizado para cocinar al aire libre y compuesto por alcohol desnaturalizado, agua y un gel a base de petróleo.
Cocteau Twins: El trío estandarte del dream pop se fijó en una banda también escocesa que les había antecedido dos años, ya que los primeros se formaron en 1979 y los segundos en 1977. Este grupo entonces se hacía llamar Johnny and the Self-Abusers y tenían una canción llamada “Cocteau Twins”. Poco después pasarían a llamarse Simple Minds, obteniendo un gran éxito, y su canción se retituló “No Cure” a tiempo para ser incorporada a su debut Life in a Day de 1979.
Dali’s Car: Existen dos versiones acerca del origen del nombre de la banda que creó Peter Murphy un año después de su etapa al frente de Bauhaus. La que nos interesa: que está tomado del nombre del instrumental “Dali’s Car”, que Captain Beefheart incluyó en el mítico Trout Mask Replica (1969). La otra indicaría que el nombre proviene de un sueño que tuvo un amigo de Murphy en el cual compraba un coche que perteneció a Salvador Dalí.
Deacon Blue: Según Steely Dan, su canción “Deacon Blues” del álbum Aja (1977), “refleja nuestros sueños antes de convertirnos en músico de jazz mientras vivíamos en los suburbios. Es el sueño no realizado de un hombre roto que vive una vida destrozada, jugando con el cliché del músico de jazz como antihéroe”. El escritor Norman Mailer les sirvió de inspiración y su nombre lo sacaron de un jugador profesional de fútbol americano. Los escoceses Deacon Blue lo eligieron como nombre y se puede ver una relación con la banda surgida de los suburbios de Glasgow y sus aspiraciones.
Death Cab for Cutie: Canción del grupo Bonzo Dog Doo-Dah Band de su álbum Gorilla (1967) que esta banda británica de los sesenta había compuesto a partir de un titular en un periódico sensacionalista de una mujer fallecida en un accidente de taxi (“Taxi Mortal para la Belleza”). Según Ben Gibbard, líder de Death Cab for Cutie, “Gracias a la Wikipedia ya no tengo que explicar en cada jodida entrevista de dónde viene el nombre de mi banda”.
Deep Purple: La abuela de Richie Blackmore tenía como canción favorita este tema del pianista Peter DeRose en 1933 y que fue llevada al éxito por Bing Crosby en 1939 y, después, por Nino Tempo y April Stevens en 1963, llevándose incluso un Grammy. Cuando su nieto, el joven guitarrista, se juntó con otros cuatro melenudos cómo él en 1967, no tuvo más que acordarse de su querida abuela para nombrar al quinteto.
dEUS: A Tom Barman, guitarrista y vocalista de la banda belga dEUS, le rondaba la cabeza la idea de nombrar a su banda con alguna terminología cercana a Dios, y se barajó –y se descartó, afortunadamente– el nombre The Godmothers. Se abría la década de los noventa y la inspiración le vino en el título de una canción publicada poco antes, en 1988. El tercer single del disco Life’s Too Good de los Sugarcubes fue “Deus”. La inversión de las mayúsculas y minúsculas atiende meramente a un capricho de Barman.
Diamond Dogs: Aunque su propuesta se acerca más a los preceptos de los Stones setenteros, de los Faces o incluso de los Slade más centrados, el nombre de los suecos Diamond Dogs proviene, como es fácil intuir, de otro emblema de la música de la década de los 70. En 1974 Bowie había enterrado a Ziggy Stardust y publicaba su octavo disco, Diamond Dogs, del cual salió como segundo single la canción que le daba título, y que sirvió a Sören ‘Sulo’ Karlsson y compañía para bautizar a su banda.
Dr. Feelgood: El primer músico de blues en llegar a las listas de éxito fue Willie Lee Perryman, un albino casi ciego, más conocido como Piano Red en un primer momento. Cuando firmó con el sello Okeh en 1961, Perryman comenzó a usar el nombre Dr. Feelgood and the Interns, lanzando varios éxitos como “Doctor Feelgood”, precisamente el tema que daría nombre al más grande combo del pub rock, directamente desde Canvey Island.
Dum Dum Girls: “Mi marido y yo estábamos en nuestro salón; era muy pequeño, y lo único que teníamos eran discos. Estaba mirando una pila de discos y el que estaba encima era Dum-Dum de los Vaselines, y sólo decir las palabras sonaba bonito y divertido. Mi marido dijo: ‘¿Y Dum Dum Boys? ¿Como la canción de Iggy Pop?’ Y yo dije: ‘¿Y Dum Dum Girls?’ Él pensó que era una buena idea y quiso llamar así a su banda, pero meses después estaba de gira y claramente NO se llamaba Dum Dum Girls [risas]. Y yo le dije: ‘Vale entonces, voy a compartir estas canciones y voy a llamarlo Dum Dum Girls’. De ahí salió el nombre”. Así explicaba Dee Dee Gundred a Self Titled Magazine el origen del nombre de su banda, una mezcla de nombre de disco, nombre de canción y tuneo.
Endless Boogie: En 1971, un John Lee Hooker de 61 años se rodeaba de gente como Steve Miller, Carl Radle, Jom Gordon o Jesse Ed Davis para publicar el doble álbum Endless Boogie en el sello ABC. Veintiséis años después, unos cuantos empleados de Matador Records en Brooklyn se reúnen para pasar el tiempo y tocar en un local todo aquello que les gusta, léase psicodelia, blues rock, stoner… recurriendo al áspero y primitivo sonido del maestro Hooker para tomar el nombre de su banda, concretamente el de la canción titular de este álbum. A día de hoy cuentan con seis discos de estudio.
Eric’s Trip: No habían transcurrido ni dos años desde que se publicase el seminal Daydream Nation de Sonic Youth cuando un cuarteto de jóvenes de Moncton –entre los que se encontraba Julie Doiron–, al sureste de Canadá, tomaban el título de la quinta canción del álbum, “Eric’s Trip”, para bautizarse. Tres años después se convertirían en la primera banda canadiense que fichaba por el sello Sub Pop, de Seattle, en la otra costa, a 52 horas en coche desde Moncton, en línea recta.
Fire Engines: Procedentes de Edimburgo y banda de corta vida, Fire Engines surgieron cuando el punk daba sus últimos coletazos y publicaron un elepé y un puñado de singles (de los cuales salieron dos nombres de bandas más, The Candyskins y Meat Whiplash) entre 1980 y 1981, para disolverse a continuación. El origen de su nombre está en una canción del primer y soberbio disco de 13th Floor Elevators, titulada, obviamente, “Fire Engine”.
Fortunate Sons: Si buscas hoy en día “Fortunate Sons” en Google, te saldrán miles de enlaces a una banda tributo de la Creedence. Pero, en los años 80, cuando esta plaga no había ni comenzado, hubo un grupo llamado Fortunate Sons en el cual militaban Chris Wilson y Robin Wills, ex-Flaming Groovies, y al que muchos conocimos gracias a esta revista. En su corta existencia, la banda no se alejó de las premisas de rock and roll y garage de sus antecesores, y su nombre, como es fácil deducir, viene del alegato antibelicista que John Fogerty incluyó en el elepé Willie & The Poor Boys (1969).
Gigolo Aunts: Efectivamente, en el segundo disco de Syd Barrett, ex componente de Pink Floyd, y titulado con su apellido (1970), la canción que abría la cara B se titulaba “Gigolo Aunt”. El grupo de Boston lo adoptó como nombre -en plural-, aunque también repararon en la canción “Gigolo” de The Damned que dice “I ain’t no gigolo aunt”, y que estos se la habían tomado prestada a Barrett.
Golden Earring: Los holandeses se llamaban en un principio Tornados, pero optaron por cambiarlo cuando descubrieron que ya lo estaban utilizando otros. Para cambiarlo lo tuvieron fácil: tomaron su nombre de una canción llamada “Golden Earring” de Hunters, un grupo del Reino Unido con el que a menudo realizaban giras. Estos, a su vez, lo habían tomado de “Golden Earrings”, la canción principal de la película En las rayas de la mano (Mitchell Leisen, 1947).
Grinderman: El proyecto paralelo de Nick Cave a los Bad Seeds se formó en 2006, tras componer una canción llamada Grinderman, deudora del “Grinder Man” de John Lee Hooker y del “Grinder Man Blues” de Memphis Slim. En esta última, Slim cantaba “Mientras todo esté tranquilo y sea fácil / Mr. Grinder puede salirse con la suya”, una metáfora de la sociedad y, también, de la nueva aventura de Cave.