LOS CABALLEROS BLANCOS
Los caballeros blancos
Joaquim Lafosse (Golem)
Lafosse nunca lo pone fácil. Su anterior cinta, Perder la razón (comentada aquí en su momento) nos acercaba al caso de una mujer belga que asesinó a sus cinco hijos. Tras su visionado, no era fácil tomar partido. ¿Asesina o víctima?
En Los caballeros blancos nos coloca de nuevo ante un dilema moral, uno de sus grandes méritos: ¿Justifica el fin los turbios medios? Basado en el caso real de una ONG francesa llamada El Arca de Noé (aquí Move for Kids) que trató de sacar a 300 niños del conflicto en Chad para que los adoptasen padres franceses que habían pagado 2.200 euros, su ambigüedad moral invita al espectador a reflexionar desde el principio, siendo complicado tomar partido.
Con un tono crudo y contenido, de ritmo ágil, su relato parece enfocado como un documental realista, en la que los protagonistas se enfrentan a cada minuto a situaciones límites azuzadas tanto por tensiones internas como externas, y en las que es difícil delimitar la línea que separa el bien del mal. En medio de tanto conflicto moral, en el que el Presidente de la ONG está perfectamente trazado en el guion e interpretado con convicción por Vincent Lindon, otros personajes como la periodista o el timador de la tribu podían haber dado más juego. En cualquier caso, incómoda y necesaria al mostrar una realidad con la que nadie se atreve.