RAP Novedades 1993

EL RAP DEL 93

   

Al lado del gansta-rap, de tipos como Ice-T, Snoop Doggy Dog, Professor Griff, Ice-Q o Cypress Hill -que se tiran todo su Black Sunday reclamando la legalización de la marihuana-, el 93 ha tenido un hueco para otras bandas que buscan fundir el hip-hop con el jazz, el soul y hasta los ritmos tradicionales irlandeses. Después de intentos como los de Grandmaster Flash, Run DMC, LL Cool, Stetsasonic, Dream Warriors, Gang Starr e, incluso, Miles Davis, parece que el hip-hop y el jazz han encontrado el momento ideal para su fusión natural.

El más clásico nos ha salido Guru, quien ha llamado a músicos de jazz como Donal Byrd, Brandford Marsalis, Ronny Jordan o Courtney Pine para que pongan instrumentos auténticos y notas de jazz, en lugar de samplers, por debajo de los rapeados de Guru, junto a N’dea Davenport, DC Lee y MC Solaar. Jazzmatazz (Chrysalis-EMI) es «una fusión experimental de hip-hop y jazz», tal y como dice Guru, líder, junto a D. J. Premier, de Gang Starr. «El hip-hop es hijo del be-bop». Puede sonar un poco frío y nada revolucionario, pero sólo es el primer volumen.

Sin embargo, han sido US 3, con su Hand On The Torch (Blue Note – Hispavox), los primeros que han obtenido del legendario sello de jazz Blue Note licencia absoluta para trabajar sobre su fondo de catálogo. Más de uno tenía ganas de asistir a la definitiva fusión entre el jazz de Blue Note y el rap. Es decir, les han dado la posibilidad de samplear a su antojo la historia del jazz y añadirle recitados rap por encima. Un lujo al que los productores londinenses Geoff Wilkinson y Mel Simpson no han sabido extraerle todo su provecho, a pesar de aciertos como «Cantaloop». No es más que el principio de algo excitante que está por llegar, y de un segundo disco que promete más que este primero.

Por si alguien lo había olvidado, los Digable Planets también intentaron su particular fusión en el 93. Ellos no necesitaron de auténticos músicos de jazz ni obtuvieron permiso para entrar a saco en el catálogo de Blue Note. Por el contrario, su Reachin’ (A New Refutation Of Time And Space) (Pendulum-WEA) es de lo mejor en el terreno de la fusión del hip-hop y el jazz. Para ello el trío ha utilizado con imaginación los medios a su alcance y buenos samplers, logrando un disco embrujador, de ritmo espacial, y en el que pululan el espíritu de Charlie Parker, Miles Davis, Curtis Mayfield o Jimi Hendrix.

La resurrección de los últimos meses la han protagonizado De La Soul. Tras el magnífico 3 Feet High And Rising de debut, agotaron nuestra paciencia con un De La Soul Is Dead -«»De La Soul están muertos»- bastante explícito. Sin embargo este Buhloone Mindstate (Tommy Boy-GASA) recupera toda la magia que el trío de Long Island sabe conseguir, con el jazz recuperado con Maceo Parker en «I Be Blowin'», «Patti Dooke», «I Am I Be», «Long Island Wildin'», el soul en «Breakadawn» y el chiste orgiástico en «Dave Has A Problem… Seriously». El hip-hop recupera así una de sus voces más escuchadas, y sus bocas no están ya tan cerradas como sugiere ese espléndido dibujo de la portada.

Más o menos lo mismo ha sucedido con Jungle Brothers, quienes recuperan parte de lo mejor que había en su segundo disco Done By The Forces Of Nature. Su presente pasa por J. Beez Wit The Remedy (WEA), tres años después, que vuelve a mostrar su ya típico conglomerado de ritmos e instrumentos afroamericanos. Incluso se destapan con el humor en «Spark A New Flame», «I’m In Love With Indica» o «My Jimmy Weighs A Ton». La cuestión es que ya no sorprenden de la misma forma, pero siguen teniendo una fórmula atractiva.

Las enseñanzas de Arrested Development han encontrado seguidores en Gumbo. Su primer disco, Droppin’ Soulful H2O On The Fiber (Chrysalis- EMI), recupera el espíritu de comuna agraria-naturista–hippy de los primeros. Además, está producido por Speech, de los Arrested Development. Entre sus samplers se cuentan Carole King, James Brown, Average White Band o Tom Scott. Son divertidos, contagian alegría en «A Free Soul», hablan de la hermandad africana y nos desean «paz, amor, unidad y respeto para todos». Buenas intenciones y buen rap-soul.

The Goats han sido la sorpresa del año. Tricks Of The Shade (Columbia) combina, como ningún otro disco, hip-hop con un acercamiento rock y unas bases funky. Son decididamente políticos, como lo atestiguan «Noriega’s Coke Stand», «Georgie Bush Kids» o «Burn The Flag». Por si fuera poco, lo reparten todo en 25 cortes; así, siempre hay algo nuevo para quien cree haberlo oído todo antes. Por eso The Goats han conseguido, junto a Digable Planets, el disco hip-hop del 93.

Con Marxman y sus 33 Revolutions Per Minute (Talkin’ Loud-Polygram) tenemos por fin el hip-hop irlandés, aquel que Sinead O’Connor, ajena a esta escena, había intentado en una canción de su segundo disco. Marxman añaden detalles de instrumentos tradicionales irlandeses -bodhran, banjo, flauta- a unas letras inspiradas en los manifiestos de Marx, Engels, Lenin o Trotsky. Ni una cosa ni la otra llegan a dominar el disco, pero le dan una vitalidad evidente a canciones como «Father Like Son», «Ship Ahoy», «Sad Affair» y «All About Eve». Eso es 33 revoluciones por minuto, un disco serio con un sentido bastante pop del rap.

RADIO 3 La desaparición 1993

La desaparición de Radio 3

 

Otra vez se repite la historia. Es el tercer intento, aunque parece ser que el definitivo. No podemos permanecer tranquilamente sentados ante lo que se nos viene encima. Quieren desmantelar definitivamente Radio 3, nuestra Radio 3, la única emisora estatal verdaderamente joven. Como suplemento juvenil también tenemos bastante que decir. Cuando el segundo de los intentos ya denunciamos desde aquí la maniobra y a sus auténticos responsables.

Todo comenzó bajo la dirección de Luis Solana al frente de RTVE, cuando se suprimieron todos los programas libres, que resultaban incómodos para el poder, empezando por los informativos propios y todos los programas culturales del tipo Perfil del ruedo, La barraca o Caravana de hormigas. Luego vino la reconversión en radio-fórmula musical, eliminando la mayoría de los musicales especializados para dejar a la programación de Radio 3 sin nada que la diferenciara de las grandes cadenas comerciales. El penúltimo paso se daba este año, al introducir en el hueco más apetitoso de la emisora -de ocho y media a once de la noche- los programas de la UNED.

No es nada comparado con lo que se nos viene encima. Diego Carcedo, al frente de Radio Nacional, pretende eliminar doce horas de programación musical -toda la franja horaria diurna- para introducir programas de salud, consumo, tercera edad… Ya no vale el modelo de la BBC o de la antigua Radio Cadena. Con ello quedan totalmente suprimidos los programas musicales especializados en las emisoras públicas y una buena parte de los oyentes quedamos definitivamente huérfanos.

Por si fuera poco, intentar desorientar a todo el mundo centrándolo en un conflicto con las pequeñas discográficas. Ni los índices de audiencia -400.000 oyentes según el último Estudio General de Medios-, la excusa habitual de estas lúcidas mentes, volverán a darles la razón. Contra este lamentable montaje sólo queda desenmascarar a los responsables y presionar para salvar lo poco que nos queda.

Por supuesto que la programación actual de Radio 3 es mejorable y que ni siquiera tiene el honor de poder competir con su glorioso pasado. Además, aunque la radio-fórmula no tiene por que ser una idea equivocada, habría que empezar a pensar en la especialización total de la emisora, el auténtico futuro de la radio.

¿Cómo se puede cargar de un plumazo una emisora que ha tenido esta orientación durante unos quince años? Los gestores de una emisora no tienen que entender de música -para eso ya están los programadores- aunque sí deberían, desde una emisora pública, luchar por diferenciarse de las restantes cadenas. También deberían entender que los jóvenes también tienen sus derechos y que no todos quieren quedar adocenados por la radio-fórmula convencional.

Intentaron transformar Radio 2 y las voces que se alzaron contra ellos consiguieron evitarlo. Como no pudieron con la emisora ‘clásica’ de Radio Nacional, ahora se vuelven contra Radio 3, pensando que los jóvenes no moverán un dedo. Que lo intenten.

(Quien quiera hacer constar su protesta debe dirigirse a: Diego Carcedo, Radio Nacional, Prado del Rey, Madrid 28223; o, si no, al teléfono de reclamaciones: 91-3462030).

CROWDED HOUSE 1993

Crowded House, pop de corte clásico

 

Cuando Peter Gabriel estaba buscando intérpretes de una cierta calidad para que participaran en el festival WOMAD, una de las giras más importantes de las que se celebran cada año en el mundo y que cuentan con artistas de varios continentes, escogió a Crowded House entre sus participantes. Puede parecer extraño ya que, después de todo, el grupo australiano es conocido por construir pop de corte clásico con evidentes destellos de ingenio, un estilo bastante alejado del exotismo musical que suele asociarse con las propuestas étnicas que componen habitualmente el cartel del WOMAD o con la música elaborada del propio Gabriel.

THE DOORS 1993

The Doors, la plegaria americana

 

No quedaba nada por editar de The Doors en disco compacto, salvo un homenaje póstumo que le hicieran sus compañeros a Jim Morrison, algo que ya había sucedido con anterioridad, después de la muerte del líder de la banda. Fue en 1.978 cuando el resto del grupo decidió editar un disco llamado An American Prayer, con los versos de Jim Morrison y música de acompañamiento escrita especialmente para la ocasión.

Eso es exactamente lo que ahora se reedita en compacto, más de 25 años después de la última grabación de The Doors. El motivo no era otro, en su momento, que recuperar los excelentes poemas de Morrison, completando el círculo en torno a la mente artística de una de las figuras míticas del rock.

Esta reedición se convierte en imprescindible para los que navegaron a través de la discografía oficial de la banda americana y, también, para los que entendían el trabajo de Jim Morrison como algo perfectamente separable del resto de la producción de The Doors, bien por la importancia de las letras o bien por los poemas que publicó en varios libros.

En este trabajo hay tres cortes no publicados con anterioridad en la edición del 78: «Babylon Feeding», una canción que nunca antes se había escuchado, revitalizada digitalmente con nuevos efectos de sonido; «Bird Of Prey», con casi un minuto de Jim Morrison cantando a capella, y una nueva versión de «The Ghost Song», grabada por los miembros supervivientes del grupo: Ray Manzarek, Robby Krieger y John Densmore.

Además, esta versión de «The Ghost Song» ha sido el tema elegido para sonar en las emisoras de todo el mundo. El vídeo de la canción mostrará imágenes de HiWay, una película que Jim Morrison rodó durante bastantes meses de 1969, pero que nunca llegó a acabar antes de su muerte en París y que, por lo tanto, tampoco llegó a estrenarse en las salas de cine.

Con la reedición de este An American Prayer por parte de la compañía discográfica Elektra, queda completo el catálogo de The Doors que comprende The Doors, Strange Days, Waiting For The Sun, The Soft Parade, Morrison Hotel, LA Woman, la banda sonora de la película The Doors, dirigida por Oliver Stone, la recopilación Best Of The Doors y una actuación en directo titulada, cómo no, In Concert.