TEARS FOR FEARS
Tears for Fears, punto de inflexión
The Tipping Point es el séptimo álbum de estudio y primero en casi 18 años de Tears For Fears, desde Everybody Loves a Happy Ending (2004), el dúo británico formado por Roland Orzabal y Curt Smith. Se trata de una colección de canciones en las que reflexionan sobre los puntos de inflexión a nivel personal y profesional de la pareja -y del mundo- con los que se han enfrentado en esas casi dos décadas.
“Era de la máxima importancia para nosotros que este trabajo combinara con ingenio la producción clásica de Tears For Fears y letras emotivas. Creemos que hemos creado un disco contemporáneo y eterno para que a fans, nuevos y antiguos, les guste”, reconoce Roland Orzaba. “Para que todo fuera perfecto para este disco, antes todo tuvo que ir mal, llevó años, pero algo sucede cuando nos juntamos. Tenemos un equilibrio, un toma y daca, y funciona bien”.
Su compañero Curt Smith coincide: “Si el equilibrio no funciona en un álbum de Tears For Fears, es imposible que el álbum funcione. Para simplificar, un disco de Tears For Fears y lo que la gente conoce como el sonido Tears For Fears, son las cosas en las que estamos los dos de acuerdo”.
El dúo empezó a trabajar en este álbum encargando material a algunos de los mayores compositores de temas de éxito del momento como les dictó su anterior mánager. En poco tiempo, este intento fracasó. Orzabal lo explica así: “Al final, esa tensión y presión nos separaron, no solo de nuestro mánager, sino uno del otro”. Tears For Fears cambió de mánager, uno que puso por las nubes los cinco temas en los que la banda estaba de acuerdo. Orzabal sigue contando: “De repente, por primera vez en mucho tiempo, sentimos que teníamos a alguien de nuestro lado que entendía lo que queríamos hacer. Fue la primera vez en mucho tiempo que decidimos los dos que queríamos hacerlo”.
“Cuando conoces a una persona durante tanto tiempo como nosotros, y has trabajado con ellos todo ese tiempo, hay un lazo que se convierte en familiar. Y es distinto de una amistad”, cuenta Smith. “Y es distinto del matrimonio. Es literalmente como tener un hermano. Es el clásico vínculo que no puedes romper. Puede desaparecer a veces. Te separas durante un tiempo, que además creo que es sano en realidad. Pero al final, siempre acabamos estando juntos de nuevo”.
Ambos nos presentan las canciones de su nuevo disco:
No Small Thing:
Roland: Cuando empezamos con este disco, hicimos lo que se llama “citas rápidas” donde te juntas con un montón de compositores y productores. Y no sientes que la opción sea “Bueno, ¿qué es lo que quieres comunicar?” Lo normal es que ellos te digan “Bueno, tuviste un éxito en el pasado y sonaba así…”
Curt: “Así que intentemos hacer otro parecido”
Roland: “Sí, hagamos algo similar que evoque vuestro mayor éxito”. Entonces me senté con Curt y empezamos a tocar la guitarra acústica y me salió algo que sonaba totalmente a lo contrario de aquello. Sonaba orgánico. Recordaba, creo, un poco a Bob Dylan, pero al final, puedes escuchar la batería a lo Led Zeppelin y finalmente el caos. Y sonaba a nosotros. Así somos nosotros. Y era tan refrescante y literalmente, liberador. Como dice la canción. “La libertad es importante”. Y finalmente podemos expresar lo que queremos decir.
Curt: Podría haber sido un álbum con un sonido folk acústico de los sesenta o setenta al principio. El hecho de que tuviéramos la confianza suficiente para ir desde ahí hasta el final de la canción, que acaba en un caos total, habla del sentido de la libertad y esa es nuestra zona de confort curiosamente.
The Tipping Point
Roland: Nuestro guitarra, co-compositor y co-productor Charlton Pettus nos envió una pista de acompañamiento muy extraña. Creo que Charlton estaba un poco cabreado porque estábamos hablando con todos estos compositores cuando él es realmente bueno con estas cosas. Así que hizo lo que todo el mundo hace cuando piensa “mezclaré un poco de “Everybody Wants to Rule the World” y un pequeño guiño a “Head Over Heels” pero claro, “The Tipping Point” no se parece a eso. Esto coincidió con un tiempo en concreto en mi vida en la que mi primera mujer no se encontraba bien. Básicamente la estaba viendo morirse. De ahí viene la letra. Es la imagen de una habitación de hospital donde solo puedes mirar a alguien y esperar el momento en que están más muertos que vivos. Ese es el punto de inflexión, es casi como si parte de ti estuviera dispuesto a pasar el umbral porque estás en ese purgatorio mientras ellos están en el purgatorio.
Long, Long, Long Time
Curt: Hay algo realmente extraño en esta canción. Porque no se parece a nada que haya escuchado: es un montón de partes que realmente no deberían funcionar juntas pero que lo hacen de alguna manera hasta que la signatura del compás cambia del verso al estribillo. Es una canción que necesitaba dirección y la encontró por sí misma, especialmente una vez que Carina Round, que canta con nosotros cuando estamos de gira, se unió al coro.
Roland: Siempre sentí que al escuchar la letra sobre algo que tarda “tanto, tanto, tanto tiempo” Curt se estaba quejando y culpándome. Por supuesto, es cierto.
Curt: Bueno, no es totalmente cierto. Trata realmente de estar cansado de tratar de mantenerte a flote y estar preparado para avanzar. Podía haber sido sobre una relación personal, como con Roland, pero también tiene sentido social y políticamente. Algo ahí fuera necesitaba un empujón.
Break the Man
Curt: “Break the Man” empezó con Charlton Pettus y trata de una mujer fuerte -algo obvio- pero también sobre romper con el patriarcado. Creo que muchos de los problemas que tenemos en este país, y en todo el mundo, hasta cierto punto tienen que ver con la dominación masculina. Es una canción sobre una mujer que es lo suficientemente fuerte como para para doblegar al hombre. Para mí, sería una solución a muchos de los problemas del mundo, un mejor equilibrio entre lo femenino y lo masculino. Como en nuestra relación musical, se trata de la palabra equilibrio. Si pudiéramos encontrar un sentido mejor del equilibrio entre hombres y mujeres, tendríamos más armonía (espero no sonar como un viejo hippie).
Roland: Uno intenta no presumir.
Curt: Y a pesar de eso, lo hace.
Roland: Estamos muy orgullosos de “Woman in Chains”. Recibimos muchos palos de otros artistas – nuestros colegas. No diré nombres… vale, Pet Shop Boys. Y Spandau Ballet.
Curt: Hemos sido criticados por ello, pero no estoy convencido de que realmente haya algo malo en ser sensible. Nos han llamado eso durante años, pero llegas a cierta edad, y te das cuenta de que la verdadera respuesta a esa afirmación debería ser “Gracias. Gracias por llamarme sensible”.
My Demons
Roland: Al principio trabajamos mucho con Sacha Skarbek en este álbum y con su programador Florian Reutter desde Alemania. Nos presentaron una pista y alucinamos. Después propusimos algunas letras alocadas sobre vigilancia y todo tipo de cuestiones. Sí, “Mis demonios no salen mucho…” podría ser un poco desechable como letra, pero esta canción tiene un ruido infernal, y estamos muy orgullosos porque los sintetizadores son muy agresivos. Como nosotros, “My Demons” mola por sí misma.
Rivers of Mercy
Roland: Mi esposa actual es muy consciente de las dificultades que tuvimos al principio al hacer el disco y al trabajar con todo tipo de gente. Un día dijo: “¿Por qué no escribes tus canciones con tu propia banda? Porque son increíbles”. Y yo dije “Bueno, no es una mala idea”. Tenemos un teclista llamado Doug Petty que tiene mucho talento. Doug se reunió con Charlton e hizo una pista de acompañamiento que era muy lenta y hermosa. La cogí al principio de la pandemia y durante los disturbios, teníamos una pieza musical increíble que evocaba la paz y también imágenes del mar o de un río. Y me pareció extraño, porque durante el primer confinamiento estaba en el West Country de Inglaterra, y era precioso. Luego enciendes la televisión o el ordenador y hay un caos absoluto. El narrador de “Rivers of Mercy” es alguien casi desesperado por volver a una época en la que no exista el caos. Esta canción contiene esa idea de redención a través del río, como en “Take Me to the River”, esa noción de redención o bautismo. Para mí, esta es una de las canciones más impresionantes que ha hecho el grupo.
Roland: Esa es probablemente mi canción favorita en el mundo.
Curt: A veces la gente cuestiona el orden de las canciones en un álbum. Tener “Rivers of Mercy” – este precioso respiro de serenidad, viniendo justo después de la intensidad de “My Demons”, la hace aún más poderosa.
Please Be Happy
Roland: “Please Be Happy” fue escrita hace años, al principio de nuestro proceso con Sacha Skarbek, con quien es un placer trabajar. Es un gran pianista y un gran tipo. De toda la gente nueva con la que escribimos entonces, Sacha es el único que se convirtió en parte de nuestro equipo. Sacha estaba en el piano tocando algunos acordes y grabándolos en su iPhone. El piano que oyes en la grabación es de su iPhone. “Please Be Happy” me tocó completamente. A un nivel muy personal, esta canción fue creada viendo a alguien a quien quieres sentada en una silla todo el día, sin hacer nada, sin moverse, y cuando lo hace, se va al piso de arriba con una copa de vino, y se cae por las escaleras. Es una canción desgarradora.
Master Plan
Roland: El narrador de “Master Plan” parece referirse a una relación, pero la verdadera inspiración para la idea viene más de la relación que tuvimos con nuestro ex-mánager. Como dice el título, trata sobre alguien en tu vida que tiene “un plan maestro”. Al menos ese es su trabajo. Y el plan maestro de nuestro último mánager fue no hacer ningún disco porque “era una pérdida de tiempo”. La canción es bastante profunda, honestamente.
Curt: Está bien que otra persona tenga un plan maestro para tu carrera. Pero no está tan bien cuando difiere del tuyo. Creo que le dábamos demasiada importancia a lo que otras personas estaban pensando, en vez de liderar nosotros mismos nuestras carreras.
Roland: Dejamos de confiar en nosotros. Hay ciertos periodos en una carrera larga que no van a funcionar para ti, así que puedes irte a casa y no hacer nada. Pero después, la marea cambia. De repente, estás flotando de vuelta al puerto, a un ritmo muy rápido.
Curt: La mitad de la batalla consiste en sobrevivir.
End of Night
Roland: “End of Night” es una de las canciones más antiguas aquí y una de esas cosas que surgen trasteando en el portátil, algo que hago mucho. Esta es posiblemente la canción más pegadiza, con más ritmo y más directa del álbum. ¿Significa algo? No estoy seguro. Es sobre Mistral, un viento que sopla en el sur de Francia. Estamos hablando del viento refrescante del cambio.
Curt: Quedaos con vuestro viento.
Roland: No tiene un gran significado, pero hay cierta alegría en la canción.
Curt: “End of Night” no trata de ser nada más que una canción pop simple y bonita. Y en este punto del disco, no me molesta para nada.
Stay
Curt: “Stay” fue escrita durante en un momento en el que estaba considerando dejar Tears For Fears otra vez.
Roland: Sorpresa, sorpresa. ¡Es un evento anual!
Curt: Es duro dejar algo que has estado haciendo durante tantos años, alimentando y construyendo. Es una canción sobre cuestionarte a ti mismo.
Roland: Es expresar el conflicto, ¿no crees? Y admitir que lo hay. ¡Lo que es siempre un comienzo!