MANDO DIAOO 2009
Mando Diao, bailando con alguien
No hace mucho tiempo, llegó una banda de la ciudad sueca de Borlänge y conquistó el mundo del rock con golpe de efecto por sorpresa. A principios del 2004, Bring ‘Em In fue el furioso debut de estos compositores bien dotados para el rock’n’roll y algo fanfarrones. Ahora presentan Give Me Fire.
Después, las cosas se sucedieron a un ritmo rápido. Un nuevo álbum cada año e incontables conciertos, cada vez en salas más grandes. Sus trabajos Hurricane Bar y Ode To Ochrasy lograron sin esfuerzo alcanzar una gran repercusión por media Europa y al otro lado del Atlántico, y su último lanzamiento, Never Seen The Light Of Day, donde experimentaban con música folk escandinava, entre otras cosas, sorprendió a todos inesperadamente.
Aunque el pasado año terminara sin un nuevo trabajo de Mando Diao, los clásicos singles “Sheepdog”, “Down In The Past” y “Long Before Rock’n’Roll” fueron canciones obligadas para cualquier pinchadiscos de rock que se preciara en 2008. Y aun sin un nuevo lanzamiento, el año fue muy positivo para la banda. “Los dos guitarristas, cantantes y compositores, Gustaf Nóren y Björn Dixgård se casaron, y la mujer de Nóren dio a luz un niño”.
El estudio que la banda adquirió en Estocolmo se terminó en primavera. “Así que en mayo de 2008, estábamos listos para empezar a grabar nuestro quinto álbum bajo la dirección sonora del bajista C-J Fogelklou y del teclista Mats Björke. El proceso de grabación se finalizó en noviembre en la soleada Long Beach, donde un amigo nuestro tiene un estudio.
El resultado es su nuevo álbum, Give Me Fire, que, su ponemos, continuará ampliando su base de fieles seguidores. “Ninguna canción es como las demás aunque todas ellas son típicas de Mando Diao”, asegura el grupo. Y ‘típicas’ es sinónimo de perfectas para el grupo cuando se refieren a ellas.
Para empezar, el primer single, “Dance With Somebody”, que es tan sencilla como acertada. “Si, es una canción muy sencilla”, confirma Fogelklou, “probablemente la canción más simple que hayamos grabado. Pero el efecto es sencillamente espectacular”. Puede asegurarlo. Un ritmo arrollador, un bajo bombeante, unos teclados deslumbrantes y unas guitarras que retumban en círculos, encumbradas por unas voces resultonas. Gracias a su estribillo, será imposible que te saques de la cabeza este éxito con sabor disco setentero.
“Dance With Somebody” no es la única sorpresa. “Gimme Fire” se revela con un moderado reggae, “The Shining” es como un encuentro entre Ennio Morricone y Lee Hazelwood en un bar de mariachis y en “Nothing On Me” realmente demuestran haber hecho los deberes. “El sonido de este último tema es como si “War Pigs” de Black Sabbath, “Fire” de Arthur Brown y “War” de Edwin Starr -en la versión de Eric Burdon- se hubieran mezclado en una turmix a toda velocidad”.
¿Se vuelven Mando Diao hacia un metal pop psicodélico? “Aunque fuera sólo una vez en la vida quería escribir una canción como ésta”, explica Dixgård, quien no se anda con rodeos cuando canta sobre ‘fascistas y ciertos policías’. “Es una sencilla y pequeña canción rebelde que me ayudó a sacarme del pecho las agresiones sufridas”.
Naturalmente, hay también un número de temas de rock poderoso como “Go Out Tonight” y “Gloria”, con sus guitarras claras como el agua cristalina, y un genial coro lascivo con reminiscencias de Tom Jones. De otra parte está “Blue Lining”, un potente rock con el sonido característico de la banda desde sus comienzos, o sea, otro posible single de éxito.
Pero eso también podría decirse de todos los temas nuevos, como el silbante anhelo del rítmico “High Heels”, por ejemplo, que sumerge a los oyentes en la atmósfera del cabaret de París de finales de los 40, o “Mean Street”, un tema eufórico para pasar un buen rato que revela el amor de Mando Diao por el sonido Motown y la grandiosidad de Broadway.