La vida que amo. Un homenaje a Rafael Berrio

VARIOS: La vida que amo. Un homenaje a Rafael Berrio (Gema Amiama Marquínez-Warner)

 

Desde su muerte a los 56 años debido a un cáncer fulminante de pulmón, no hemos dejado de echar de menos a Rafael Berrio todos los días. El mejor letrista del rock español, con permiso de José Ignacio Lapido (presente, por cierto, aquí con “Abolir el alma”), dejó a sus escasos pero fieles seguidores huérfanos. Es su pareja, con la colaboración indispensable del granadino Raúl Bernal, quien ha puesto en marcha un disco de homenaje al donostiarra que sirve para darle una nueva oportunidad a sus grandes canciones en voces de otros.

 

Da un poco más o menos distinguir a unos por encima de otros. Todos lo hacen de corazón, incluyendo aquellos que eran sus amigos (Diego Vasallo) o para los que compuso varias canciones (Mikel Erentxun). Están también admiradores (Tulsa) que lo descubrieron en sus últimos años, cuando los discos 1971 (2010) y Diarios (2013), de deje más afrancesado, lo llevaron a unas cotas de popularidad superiores al resto de sus discos en solitario o con sus bandas Deriva o Amor A Traición.

 

Curiosamente, esos dos discos solo cuentan aquí con tres versiones, probablemente por lo singulares que son y lo más complicado de adaptarlas, mientras que el más representado es Niño futuro (2019), el más rock y velvetiano de su trayectoria. Solo cabe agradecerles a todo el esfuerzo para que alguien más lo descubra y para que siga viviendo en la memoria del resto que tanto lo añoramos.

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *