LA HABITACIÓN ROJA
Nuevos tiempos en todos los sentidos, incluso desde el título de su quinto disco, el del cambio en muchos sentidos. Ellos mismos nos explican las razones tomando como base algunos de los títulos de sus nuevas canciones para la entrevista.
“Scandinavia”: ¿Alguna vez ha pensado La Habitación Roja en prestar atención a otros países o creéis que sólo tenéis posibilidades en España?
– Ya hemos tocado fuera, sobre todo en Latinoamérica. También podríamos intentarlo en Europa, presentándonos con nuestras canciones en castellano. Ahora mismo hay alguna posibilidad de hacer algo en Francia. Alguna vez hemos hablado de grabar nuestras canciones en inglés, aunque, por lo de ahora, lo primero es lo de aquí. De todas formas, todos estos viajes y conocer gente nueva nos resultan muy estimulantes.
“Nuevos tiempos”: Además de lo evidente, productor y nueva compañía, ¿en qué se concretan? ¿Hay una nueva voluntad, un nuevo sonido?
– Sí. El título ya lo hace evidente, aunque barajamos varios títulos. Pero es cierto que se trata de una nueva etapa; además de lo que señalas, también cambiamos de editoral, de mánager, de agencia de contratación, de forma de grabar, de mentalidad en directo pensando que cada concierto es el último… Cuando el grupo se formó, el PP ganó las elecciones, y este año la cosa ha cambiado, lo que ha significado un cierto alivio y nuevos tiempos; ya veremos cómo acaba la cosa.
“Agujeros negros”: ¿En algún momento habéis pensado en tirar la toalla? ¿Cuándo ha sido el momento de mayor desesperación dentro del grupo?
– Siempre hay altibajos. Somos como una familia, con nuestros más y menos, pero por encima de todo está este proyecto. El momento de crisis vino después de Radio; hubo un replanteamiento y decidimos volver a las barricadas, ir a lo nuestro sin fijarnos en los demás. Así, después de diez años, hemos tenido la suerte de grabar con Steve Albini y hacer una gira por América.
“Por ti”: ¿Notáis que tenéis una legión de fieles? ¿Cuál ha sido la mayor barbaridad que ha hecho uno de vuestros seguidores?
– Ése ha sido siempre el objetivo del grupo pero sin hacer concesiones, haciendo lo que podemos. Lo que nos interesa es hacer canciones que aguanten el paso del tiempo. Queremos que, aunque pase el tiempo, podamos seguir tocando canciones de todos nuestros discos y que sigan sonando vigentes.
“Nunca ganaremos el mundial”: ¿Pensáis que estáis jugando en la primera división del pop independiente estatal? ¿Creéis que os merecéis la primera plana?
– Tenemos todo tipo de reacciones, aunque casi nunca indiferencia. Creo que nunca seremos un grupo gigante, pero si que jugaremos algún que otro partido importante. El tiempo nos dará la razón y, de hecho, ya nos lo está dando. Lo que más valoro es que, a mis 32 años, puedo coger la guitarra y cantar mis canciones, así que me siento afortunado. Y una de las cosas de las que me siento más orgulloso, y que se nos reconocerá, es hacer pop en castellano.
“El eje del mal”: ¿Alguna vez el grupo ha salido del ámbito de las relaciones personales? ¿Alguna referencia política en las canciones? ¿O pensáis que hablando de lo que tenéis más cerca es cuando más universal se puede ser?
– Nuestro lenguaje ha intentado ser siempre elegante, romántico y hablar de las cosas cercanas para demostrar nuestra actitud vital en muchas cosas. En esta canción hay una clara doble lectura que lo hace aplicable a otros aspectos. De hecho, en este disco todos los textos son menos concretos y se pueden interpretar de diferentes maneras.
“Náufragos”: ¿Cómo se sintió el grupo en vuestro periplo americano? ¿Qué es lo más asombroso de aquella sociedad?
– Para empezar, la llegada al aeropuerto de México es alucinante, por las dimensiones de la ciudad. Lo que nos sorprendió es la respuesta del público y que no tienen ningún tipo de prejuicios: que conocían las canciones y que la gente quería conocernos. Era muy extraño estar metido en el concierto y, de repente, pensar ‘pero si estamos en México’. Cuando empecé en la música, nunca pensé que haríamos una gira así.
“Gran turismo”: ¿Era un sueño ir a los EEUU o grabar con Steve Albini? ¿Qué fue lo que más os llamó la atención de su método de trabajo?
– Después de lo que he viajado en estos años, creo que es bueno salir para la salud y para la espíritu. Allí todo ha sido positivo, incluso mejor de lo que pensábamos: el trato, el material, las instalaciones, la persona… Lo que buscábamos era un sonido más contundente, y se nota en la interpretación, que tiene mucha más intención. Sin embargo, la grabación ha sido la más plácida de todas las nuestras. Y con Steve Albini nos hemos sentido totalmente a gusto con su actitud, su humildad y su genio grabando. Ha sido todo un acierto para el grupo.
“Capital”: Vuestras canciones siempre me parecieron más de filiación británica, así que sorprende un poco que para vuestro primer disco fuera hayáis ido a los EEUU. ¿Sólo se podía conseguir allí este sonido?
– En el sonido se nota la mano de Steve Albini, pero él, fiel a su forma de hacer, lo que ha intentado es recoger el sonido del grupo. Al componerlo buscábamos la crudeza, ser escuetos, conseguir acercarnos al sonido del directo, porque el grupo ya tiene su faceta melódica. Él incluso nos felicitó por el trabajo y por llevarlo todo tan preparado.