JONATHAN RICHMAN
Jonathan Richman, humor y honestidad
Jonathan Richman ha escrito canciones, editado discos y actuando en directo durante gran parte de su vida, ganando fans y haciendo amigos por todo el mundo con su honestidad sin dobleces y sus pegadizas composiciones. Admirado por muchos otros artistas, se ha construido una audiencia fiel a fuerza de hacer giras incansablemente. Sus falsamente engañosas y directas canciones representan cualidades atemporales de la humanidad, como el optimismo, la introspección emocional y un ilimitado sentido del humor, canciones libres de cinismo o de nociones transitorias de relajada felicidad. Este próximo sábado 28 se presenta de nuevo en la Sala Capitol de Santiago de Compostela.
Todas esas cualidades se hacen patentes en su último disco, Much To Be Loved As To Love, así como en su DVD en directo del 2003 Take Me To The Plaza, en el que recogía un conjunto de melodías típicamente encantadoras como “Springtime In New York”, “El joven se estremece”, “I Was Dancin’ In The Lesbian Bar”, “Couples Must Fight”, “Give Paris One More Chance” o “Vincent Van Gogh”, canción que continúa su extensa tradición de pagar un conmovedor tributo a sus héroes.
Not So Much To Be Loved As To Love era también el primer álbum que Jonathan Richman se había auto producido. “Soy el más satisfecho con el sonido del álbum”, dice. “Siento como si estuviéramos empezando a cogerle el tranquillo al sonido justo. Creo que siempre he sido mayoritariamente un artista de escenario, por lo que me costó acostumbrarme a sentirme cómodo en el estudio, pero ahí estamos. En este caso era realmente más fácil producir mi propio material porque esta vez sabía lo que quería y era, para mí, más fácil que lo hiciera yo que tratar de explicárselo a otro”.
En tanto que él puede sentir que ya está superando los problemas con las discográficas, los discos que Jonathan Richman ha presentado en los últimos 30 años han ocupado un lugar especial en le corazón de sus fans. Empezó tocando la guitarra a los 15 años y, a principios de los 70 formó los Modern Lovers, cuyo sonido crudo, minimalista y canciones emocionalmente directas ayudaron a allanar el terreno para el punk rock.
Pero para cuando el grupo lanzó su conocido álbum de debut en 1976, que incluía la versioneada canción “Road Runner”, Jonathan Richman ya se había desplazado hacia un sonido más tranquilo y centrado en otras letras. Desde entonces ha seguido grabando y girando prolíficamente, primero en una serie de formaciones con los miembros de Modern Lovers, más tarde en solitario y a veces en formato dúo, con el batería Larkins. A través de los años la música de Jonathan ha ido absorbiendo multitud de influencias, del doo-wop al country y a muchos otros estilos, sin sacrificar nunca la efervescente personalidad del artista.
Los fans de Jonathan le han seguido siendo fieles con el paso de los años y su audiencia se extiende sustancialmente en los años 90, gracias a sus frecuentes apariciones en el programa de televisión Late Night With Conan O’Brien, su destacada aparición en la famosa comedia de 1998 Algo pasa con Mary y las inclusiones de los clásicos de sus Modern Lovers “Ice Cream Man” y “I’m A Little Airplane” en Barrio Sésamo.
Durante gran parte de su carrera Jonathan ha girado casi sin parar por todo el mundo. “Viajar y tocar para gente nueva en lugares nuevos es una de mis mayores ilusiones”, apunta. “Es fantástico tocar en sitios que se salen de lo habitual. Puedes aprender mucho al tocar en un pueblecito de Holanda o de Australia, y aprendes cosas diferentes de las que aprenderías si tocases en una gran ciudad. Este año vamos a intentar tocar lugares no habituales en España en los que podríamos ser los primeros americanos que actuasen ahí. También estoy deseando que podamos tocar pronto en las Islas Canarias”.
“Hacer conciertos y grabar discos sigue siendo fácil y divertido”, dice Jonathan. “Tommy y yo tocamos ahora muy diferente de cómo lo hacíamos hace 2 años. Tocamos en un estilo distinto al que usábamos en aquel DVD en directo, y a su vez, entonces tocábamos distinto a como lo hacíamos tres años antes de ese DVD. Todavía siento que estamos empezando y cada noche aprendo cosas nuevas”.