AMOS LEE
Inspirado en pesos pesados del soul, como Stevie Wonder y Bill Withers, y en leyendas del folk, como John Prine y Dae Van Ronk, Amos Lee compone su música con un espíritu y una presencia que hunde sus raíces en la tradición estadounidense. La música de Amos pertenece a un individualísimo estilo folk-soul que pretende unir, elevar e inspirar. El lado folk se ve reflejado en su hábil manejo de la guitarra acústica y en el intimismo de sus actuaciones en vivo. Los tintes soul quedan patentes en su peculiar timbre, definido como ‘voz sin complicaciones’ y ‘emoción cruda, en estado puro’.
Su álbum de debut homónimo tiene once canciones, compuestas por Amos Lee, producidas por Lee Alexander y grabadas por Danny Kopelson en julio de 2004, durante dos semanas de sesiones en The Magic Shop, Nueva York. “Me gustan “Keep It Loose, Keep It Tight” y “Arms Of A Woman”, un terceto clásico en forma de balada que podría haber sido grabada en etapas anteriores del soul. En “Soul Suckers”, con unos delicados arreglos de cuerda, se advierte a un joven compositor acerca de los peligros del negocio de la música. “Bottom Of The Barrel”, por otra parte, recuerda al John Prine clásico por su humor y su espíritu resistente.”
Amos Lee creció entre Philadelphia, Pensilvania, y el barrio residencial Cherry Hill, en Nueva Jersey. A sus 27 años, ha dejado atrás su profesión de profesor para dedicarse al negocio de la música. “He tenido la suerte de poder conocer varias caras de la vida en este país”.
Amos Lee se matriculó en la Universidad de Carolina del Sur en 1995, y allí empezó a tocar la guitarra acústica y a componer. “Allí conocí a gente de mi estilo, gente sincera y realista que no pertenecía a ningún club. Todos eran músicos, y me enseñaron a tratar mi música con sinceridad e integridad”.
Después de licenciarse en lengua inglesa, Amos Lee volvió a Philadelphia y se convirtió en profesor de primaria. Su deseo de dedicarse profesionalmente a la música lo obligó a tomar la difícil decisión de dejar la enseñanza. Para ganarse la vida, sirvió mesas, puso copas y siguió componiendo canciones.
“Empecé a tocar en bares y a percibir la reacción del público. Poco a poco fui teniendo más confianza en mí mismo”. Un disco que publicó él mismo, con cinco canciones originales, convirtió a Amos Lee en “uno de los talentos emergentes de los que más se habla en la zona”, según el periódico local. A este prime disco le siguió un segundo con siete canciones (ambos se agotaron en la primera edición). “La época que pasó desde que dejé de dar clases hasta que conseguí el contrato fue muy hermosa y divertida”.
Después de ser el telonero de leyendas como Bob Dylan, BB King o Moose Allison, dio un paso más cuando Norah Jones se convirtió en una de sus primeras seguidoras y lo invitó a ser el telonero de su gira europea, que comenzó en abril de 2004. Equipado únicamente con su voz y su guitarra, Amos Lee se encontró frente públicos de 3.000 o 5.000 personas por noche, y hasta tres veces esa cifra cuando se unió a la gira de Norah Jones por los Estados Unidos en noviembre de 2004.
Y, noche tras noche, lo consiguió. En la crítica de su concierto en Los Ángeles, Los Angeles Times se refirió a Amos Lee como ‘un compositor y cantante con suficiente personalidad como para hipnotizar a un público multitudinario impaciente por ver a Jones’. Por otro lado, un periódico de Seattle declaró que fusionaba “un sonido folk, de franela y pantalón vaquero, con el rhythm & blues más seductor”.
“Mi época de la música favorita está probablemente entre 1970 y 1975. Still Bill de Bill Withers, Harvest de Neil Young, el primer disco de John Prine, One Man Dog de James Taylor… Espero ser capaz de transmitir el mismo espíritu que yo percibo en esos discos.” Por ahora, ha dado un gran primer paso.