SERRA DA ESTRELA, PORTUGAL
Serra da Estrela, el Portugal más recio
Es el corazón de Portugal, a 200 km. de Oporto y a 300 km. de Lisboa, pero tan sólo a unos pocos de la frontera con Salamanca. Son las provincias de Beira Alta y Beira Baixa, seguramente los parajes menos explorados de la Península. Allí se encuentra el mayor macizo montañoso del país vecino, la Serra da Estrela, convertido en Parque Natural, y que da cobijo a la única estación de esquí portuguesa.
El mayor encanto de la Serra son sus pueblecitos, en los que se preserva la quintaesencia de Portugal, nada perturbada por la influencia externa. Cualquiera de ellos es la base ideal para explorar los montes, ríos, cascadas, valles y lagos glaciares, probar su queixo da serra o tratar con la auténtica población campesina portuguesa.
La Serra da Estrela es el único parque natural con un sistema aceptable de senderos señalizados para hacer caminatas y, lo que es más sorprendente, casi nadie los utiliza, incluso en el verano, por lo que siempre se tiene la impresión de tener todo el parque a disposición de uno. El momento ideal para empezar a patear suelen ser los meses de verano, cuando los caminos están secos y las temperaturas son más agradables, ya que se encuentra a una altitud media de 1200 metros, sin llegar en ningún momento a los extremos del interior de la Península.
Hay tres rutas principales, bien indicadas, a las que se puede acceder y abandonar prácticamente en cualquier lugar. La T 1 recorre toda la longitud del parque, desde Vide hasta Guarda, a lo largo de 90 kilómetros, pasando por toda clase de paisajes, incluido el pico Torre, la cima del parque con sus 1993 metros. La T 2 y la T 3, de unos 80 kilómetros cada una, recorren la parte Este y Oeste respectivamente, pero ambas tienen sus desvíos, atajos y variantes.
La oficina de información de Manteigas facilita unos programas de caminatas por el parque con guía incluido, sin cobrar nada por el servicio, salvo la comida y el alojamiento. También el Clube Nacional de Montanhismo (075-323364) organiza caminatas o salidas para esquiar. Tienen su propio camping en Penhas da Saúde y albergues en esta misma aldea y en el Pico Torre.
Pero hay más posibilidades. Cerca de Covilha se puede contactar con Pedro Fazendeiro contratar algún paseo a caballo (075-921894). En Sabugueiro, el Ski Clube de Montanha (038-311112) alquila bicicletas y canoas, y proporcionan información sobre posibles rutas. Y está, también, la posibilidad de acercarse hasta la estación de esquí, aunque conviene saber que como es la única de Portugal está bastante masificada.
Guarda es la ciudad principal de la zona y una buena base para comenzar a explorarla. No tiene demasiada buena fama, y sus 1000 metros de altitud la convierten en fria, farta, forte e feia, según propia definición de los lugareños. Poco más hay que ver que la Catedral, con sus gárgolas y una impresionante vista desde su torre que llega hasta España, y el barrio judío o zona vieja donde está el Restaurante Belo Horizonte, uno de los mejores de toda la sierra.
De Guarda se puede ir hasta Linhares, situado en una soleada ladera del valle del río Mondego, y con tres puntos de interés: el castillo, una serie de edificaciones que parecen prehistóricas y la calzada romana que en su día llegaba hasta Braga. Gouveia y Seia son menos interesantes, aunque la primera tiene un curioso parque infantil y un interesante mercado todos los jueves. Y Manteigas es el mejor lugar para llegar hasta las cascadas del Río Zézere, en el Poço do Inferno, y al valle glaciar donde nace el río Mondego.
Al Sur y al Este de la Serra, después de las elevadas cimas, y antes de llegar a las monótonas llanuras resecas que recuerdan a Extremadura, están alguno de los pueblos más antiguos y remotos de Portugal.
Después de Belmonte, con su castillo del siglo XII, Sortelha es, tal vez, el más impresionante, un pueblo de origen hispano-árabe, aislado y misterioso, totalmente fortificado, en lo alto de una colina. Su gran puerta de entrada gótica, su castillo roqueiro y la bella Iglesia de la Matriz dominan todo el casco antiguo, a donde casi no ha llegado aún el turismo. A medida que avanza el día empieza a aparecer sus escasos habitantes que vuelven del campo por las calles empedradas acompañados de sus burros. Cerca está también Sabugal, con un gran castillo que se puede visitar gratis.
Monsanto, más al Sur, presume de ser la población más antigua de Portugal. Y puede que sea cierto, ya que parece no haber experimentado ningún cambio desde la Edad Media, con sus estrechas calles y su castillo en ruinas. Cerca está también Idanha-A-Velha, más primitiva e ilustre si cabe, con restos romanos en la basílica, un puente y viviendas señoriales.
DATOS ÚTILES:
Oficinas de Turismo:
– Seia: Casa da Janela Bonita, Praza da Republica, 28.
– Guarda: Praza Luis de Camoes.
– Manteigas: Rua 1 de Maio, 2.
Mapas y libros:
– Carta turística do Parque Nacional da Serra da Estrela: el mapa más completo, a la venta en las Oficinas de Turismo (800 pesetas)
– Descubrindo a Serra da Estrela: el mejor libro para caminatas (600 pesetas).
Alojamiento:
– 7 campings.
– Dos refugios abiertos todo el año: Covao da Ponte y Videmonte.
– Hostal de Juventud, en Penhas da Saude.
– Casa do Vento que soa, en Sortelha (una especie de castillo por sólo 5000 pesetas).
Restaurantes:
– Belo Horizonte (en el Largo de Sao Vicente, Guarda).
– O Julio (Travessa do Loureiro, Gouveia).
– Alboroque (Rua da Mesquita, Sortelha).