CAMPUS GALICIA ENTREVISTA U2

U 2, todo lo que queda detrás

u2

Puede que no sorprenda tanto, pero All That You Can Leave Behind encierra algunas buenas canciones. De todas formas, y una vez terminada la etapa de experimentar, lo de U 2 se puede convertir en algo parecido a lo de los Rolling Stones: discos con alguna canción apetecible, giras, homenajes… Sólo que Bono tiene preparada una buena retórica para demostrar que intentan huir de ello. 

– La grabación de All That You Can Leave Behind ha vuelto a ser difícil, ¿no?

– Fue dura en ocasiones. Hubo muchos momentos oscuros. Decidimos grabar en Dublín, así que, tras cada jornada, tienes que volver a casa y tratar también con esa gotera en el techo. Nuestros productores pensaban que interfería en el trabajo. Más tarde nos robaron un ordenador portátil con las letras. Pero en los últimos seis meses las cosas fueron mejor, todo el mundo estaba de buen humor y parecía que le estábamos ganando a las canciones. Las voces, que queríamos que sonasen de una forma muy concreta, empezaron a sonar bien.

– ¿Suele suceder siempre así?

– Puede decirse que sí. O tal vez sea la edad. No me sorprende lo terrible que puede ser el mundo, pero tengo que acordarme de prestar atención a las cosas hermosas. Una ola que rompe, un árbol hermoso, respirar, comer, hacer el amor, correr por una carretera, tocar un acorde y saber cuál va a ser el siguiente…

– ¿Tenéis por fin la sensación de que es un disco acabado?

– Sí, algo que no pensamos de Pop. Nos quedamos frustrados porque, por ejemplo, “Staring At The Sun” hubiese sido un single increíble de tener un mes más de tiempo para grabar. En las entrevistas nos preguntaban por el disco y no sabíamos qué decir. Al principio de la gira, la primera noche, sentí miedo real, algo que no pasó antes, por no saber qué iba a suceder, hasta el punto de que el sudor hacía muy difícil seguir.

– ¿Hay en este disco una intención de recuperar algo del pasado?

– Sé la dificultad de recuperar el terreno que hemos perdido. No fue por estupidez o ineptitud, sino porque queríamos experimentar con otras cosas. Seguimos nuestros instintos y seguiremos así. Pero todo ha cambiado. Las cosas eran como muy estables. Editábamos discos y tenían éxito. De repente, la música pop se ha hecho demasiado grande. Todo el paisaje ha cambiado y los retos también.

– Parece que todo es más simple ahora, en cuanto al sonido y la producción. ¿También en los sentimientos de las canciones?

– Bueno, mis emociones más simples me desaniman. Escribo canciones sobre grandes ideas y aspiraciones, y admiro a gente como Martin Luther King o John Hume, gente pacífica, pero yo soy capaz de agredir brutalmente. Es un instinto natural que tengo que controlar, pero que es parte de mí, lo que me ha hecho muy diplomático. Tengo la diplomacia de un psicópata, ja, ja… Sólo ocasionalmente he pegado a algún paparazzi. De lo que hablo es de una rabia más profunda.

– ¿Te preocupa?

– Es importante describir tus demonios para poder tratar con ellos. Tengo una parte de mí que quiere escapar de todo lo que se llamaría responsabilidades. Pero tengo otra más fuerte que me lleva directamente a hacerme cargo de todo. Cuando estoy trabajando todo eso sale. Y en casa: la canción “Kite” sale de ahí,de un día que intenté jugar al padre perfecto y llevé a mis hijos a jugar con una cometa. Cuando se cayó me dijeron que querían ir a jugar con los video-juegos. ¿No es cruel?

– ¿Qué reto hay en este álbum?

– El rock se ha vuelto vago y siempre ha sido así desde que éramos pequeños. No me interesa vivir de premios y avances de mis derechos. Para mí se trata de músicay es una gran lucha. Perderla no va con nosotros. La ruta obvia para nosotros sería la mediocridad, las ventas de un grupo de culto y vivir del pasado. Nos lo planteamos como si fuese nuestro primer disco. Se trata de verso, estribillo y otra vez el estribillo por si alguien se había despistado. A ver cómo se mejora eso.

– ¿Alguna vez os habéis sentido por encima de los demás?

– Muchas veces. La fama es algo estúpido, pero creo que hemos escapado de lo peor. Aún así, puedes ser culpable de una cierta pereza mental, esperando que te dejen entrar en sitios, y ahí es cuando empieza… Después vienen la culpa y la odiosa relación entre la fama y la envidia. Es humano querer ser delgado y hermoso. Pero cuando lo consigues, ¿qué puedes hacer? Lo peor es creer que tienes suerte porque eres especial. Lo que tienes es un don, que se te da en custodia. Si puedes cantar y describir las cosas con tu voz, lo que ganas te lo mereces, pero no tanto.

– ¿Y os sentís viejos?

– Es algo que discutimos mucho. Somos hombres y qué vamos a hacer. ¿Teñirnos el pelo? Va en serio, estamos luchando por nuestras vidas y que no nos dejen de lado. No queremos que la gente diga: “¡Oh, esos tipos viejos…!

– Otros grupos os piden consejos, ¿no?

– Lo que más nos preguntan es por qué seguimos en un grupo, si la gente crece y les cuesta tratar con las fricciones, por lo que empiezan carreras en solitario. Pero la fricción es una señal de estar vivo. Los que dejan a sus grupos se encuentran en los camerinos con empleados: más dinero pero menos diversión, lo que no es un trato apetecible… Los que continúan juntos son un milagro. Los grupos desafían la gravedad y lo instintos básicos humanos. Como la necesidad de independencia o el deseo de que les digan que lo dejen cuando pasan de los 30.

– Mira a Radiohead, que casi se separan por el orden de los temas de su último disco.

– Eso está bien, por el orden de los temas sí, pero no por los ingresos de los derechos de autor.

– ¿Y el consejo que le das a los otros grupos?

– Que sólo se cambien de casa cuando editan un disco en directo.

OASIS

Oasis, el tiempo perdido

         Ahora, con la presión de ser el grupo más importante del mundo un tanto reducida, Oasis editan un disco en directo y anuncian nueva gira y nuevas canciones.  Leer más

CAMPUS GALICIA ENTREVISTA TRAVIS

Travis, la suerte antes que nada

 travis

Porque no tenían mayor competencia, porque estaban en el lugar exacto en el momento justo, porque han hecho un disco con sabor a tradición pop, porque han abonado su cara más amable, porque son sencillos y accesibles… Travis vieron como otros grupos se lo comían todo el año que publicaron Good Feeling. Ahora, con The Man Who, sin hacer nada del otro mundo, el éxito les ha sonreído. Ellos reconocen que la suerte es lo primero, pero sólo hay que dejarlos crecer y podemos esperar aún mayores logros.

– Vuestro disco acaba de superar el millón de copias. Puede que ir de gira con Oasis fuera el pistoletazo definitivo. ¿Cómo fue la experiencia?

– Muy bien, todo se desarrolló tal y como pensábamos que iba a salir. Oasis son la gente más agradable con la que te puedes encontrar. Justo todo lo contrario a lo que la gente cree. Se portaron estupendamente con nosotros y lo pasamos en grande en aquella gira, como te puedes imaginar, por otra parte.

– ¿Os ayudó hacer de teloneros de ellos y de otros grupos?

– Por supuesto que sí. Quiero decir que hemos teloneado a tanta gente… Incluso hemos tocado en bodas, como en la de nuestro editor.

– Una de las canciones con las que más se queda la gente es “Driftwood”. ¿De qué habla?

– “Driftwood” la compuse en noviembre del 98 mientras lavaba los platos. Estaba escuchando al fondo un programa de televisión en el que uno de los personajes –el jefe- le decía a otro -su empleado- que se iba a deshacer de todo lo accesorio –“dritwood”-. Eran como las doce de la noche y se me quedó grabado. ¡Llamarle a alguien accesorio! Creo que fue mi primera experiencia de algo así como una metáfora. Así que mientras fregaba hice el estribillo. Corrí al piso de arriba, puse a funcionar la grabadora y registré lo que había hecho. Allí quedó el estribillo, grabado, así que me olvidé de él. Volví al día siguiente y no había nada en la cinta. Simplemente había registrado dos horas de paseos por la casa, hablándome a mí mismo. Así que me senté un par de horas y al final lo conseguí.

– ¿Y “Why Does It Always Rain On Me?

– Pues esa canción se ha convertido en algo así como la profecía hecha realidad –¿Por qué siempre llueve sobre mí?-. Siempre que la tocamos llueve. Llovía en Israel cuando la compusimos y llovía en Francia cuando la grabamos.

– ¿La estrenasteis en el Festival de Glastonbury?

– Sí, la tocamos allí. Y en el momento que estábamos con el estribillo comenzó a llover. Creí que nos iban a echar a patadas. Teníamos bastante miedo.

– ¿En algún momento vais a editar el típico disco de caras B como han hecho Oasis u Ocean Colour Scene?.

– Todos los grupos acaban haciéndolo. Nosotros tenemos unas 45 canciones, así que seguro que lo haremos. Es bastante difícil hacerse con esas canciones cuando los singles se descatalogan, así que puedes esperar algo así en el futuro.

– ¿Y el trabajo de la portada de The Man Who tenía alguna intención?

– Le dimos una copia del disco a una compañía artística llamada Blue Source, lo escucharon y decidieron que el mejor lugar para ir era algo intocado, así que nos fuimos a un lugar llamado Avimore. Queríamos algo que no se pudiera identificar, ya que pensamos que la música no tiene geografía. También se trata de un disco amable, muy orgánico, así que queríamos que la portada reflejase eso. Creo, honestamente, que es uno de los mejores trabajos del año.

– ¿Os va más el día o la noche?

– ¡La noche! Somos inevitablemente nocturnos. Y creo que sé cuál es la razón: si has tenido algún momento bueno antes de acostarte, entonces no te levantarás de mal humor por la mañana. Lo digo en serio.

– Por último, ¿en dónde estarías viviendo ahora si vuestro primer disco, Good Feeling, hubiera sido un éxito como ha ocurrido con el segundo?

– Supongo que estaríamos viviendo en castillos de aquí a un año. Creo realmente que el segundo es un disco mejor que el primero, pero también tiene mucho que ver con la suerte y con el momento en que se publica un álbum. Me empiezo a dar cuenta ahora, después de como han ido las cosas, que la suerte es lo más importante.

THE WATERBOYS

The Waterboys, la gran música

WATERBOYS

         Mike Scott, trovador y viajero, presenta el primer álbum de The Waterboys en siete años. Después de éxitos como “The Whole Of The Moon”, discos como A Pagan Place, This Is The Sea, Fishermen’s Blues o Room To Roam, y dos intentos en solitario con menos éxito, retoma el nombre de sus grandes momentos en los 80.  Leer más

NOSOTRASH

Nosoträsh, cuento de primavera

            Nada más nacer ya tenían un premio en el bolsillo, que las llevó a grabar con una gran compañía. Allí no esperaron a que fueron creciendo con su público, así que tuvieron que aguardar un buen tiempo antes de que otra compañía creyera en ellas y grabar su segundo disco, Mi vida en un fin de semana.  Leer más

1 1.330 1.331 1.332 1.333 1.334 1.402